El Internet cuántico llega a Irlanda y el Reino Unido: uniendo ciencia ficción y realidad en una conexión revolucionaria

La búsqueda de información en cualquier momento y con mínimo esfuerzo es posible gracias a Internet. Funciona como una vasta biblioteca de contenido de todo tipo. Sin embargo, navegar en línea puede ser peligroso si nuestros datos son robados. Afortunadamente, el Internet cuántico ya existe y las primeras pruebas de comunicaciones cuánticas a través de fibra óptica submarina han sido exitosas.

Al mirar atrás en el tiempo, es evidente que hemos progresado significativamente en tecnología. Contamos con PC más potentes, laptops eficientes y livianas. Los smartphones nos permiten hacer prácticamente cualquier cosa, inclusive jugar a Resident Evil Village, como hemos visto con el iPhone 15 Pro Max. Además, la velocidad de Internet ha aumentado considerablemente, permitiéndonos descargar archivos enormes en cuestión de minutos.

El Internet cuántico cubre 224 km utilizando fibra óptica submarina

A pesar del rápido progreso, todavía hay carencias en la tecnología, como la seguridad deficiente en las redes, lo que nos hace vulnerables a ciberataques y robo de datos personales. El Internet cuántico, del que se habló a finales del año pasado, ha sido probado y podría ser una solución a estos problemas. Investigadores de la Universidad de York lograron enviar información cuántica entre Irlanda y el Reino Unido, abarcando una distancia de 224 km.

Esta tecnología permite transportar múltiples terabits de información utilizando qubits fotónicos y es prácticamente imposible de hackear, lo que garantiza la seguridad y el cifrado de los datos. La prueba ha establecido un nuevo récord en comunicaciones cuánticas de larga distancia utilizando fibra óptica submarina. El Internet cuántico emplea el fenómeno del entrelazamiento cuántico, que mantiene a dos fotones conectados independientemente de su distancia.

A pesar de estos avances, el Internet cuántico, al igual que los PC cuánticos, aún es propenso a errores y está lejos de ser una tecnología comercial. En 2021 se demostró que la comunicación cuántica podría transmitir información hasta 660 km, pero no bajo el agua. Aunque hay progreso y muchas empresas están interesadas en esta tecnología para proteger sus datos, los obstáculos en términos de distancia y posibles fallos de transmisión siguen siendo un problema.