Cuando los SSD surgieron hace más de una década en tiendas de informática, su costo era bastante alto y su capacidad, limitada. No obstante, aquellos que los adquirieron en ese momento se dieron cuenta de que, a pesar del precio, valían la pena debido a la notable mejora que representaban en comparación con los HDD. Con el tiempo, los SSD han reducido drásticamente sus precios y se han vuelto más recomendados que los discos duros. Sin embargo, el aumento de los precios de los SSD podría resultar en una menor demanda en el mercado de memoria NAND, lo que podría llevar a un empeoramiento de las ventas. Sumado a los recortes de producción existentes, esto podría perjudicar el sector en general.
En los últimos años, los SSD se han vuelto el medio de almacenamiento más popular, destronando al HDD, que había dominado durante mucho tiempo. La principal razón de este cambio ha sido el precio; si los SSD fueran mucho más caros, la mayoría de las personas buscarían alternativas y terminarían adquiriendo discos duros por ser más económicos. La necesidad de almacenamiento sigue aumentando, con videojuegos que requieren más de 140 GB.
El CEO de Phison cree que si los precios de los SSD continúan aumentando, la demanda y las ventas disminuirán y la industria podría colapsar.
La pandemia impulsó las ventas de PC, periféricos, consolas y otros componentes electrónicos, incluidos los SSD. Al pasar más tiempo en casa, las personas dieron mayor importancia a las computadoras y portátiles, incluso aquellos sin mucha experiencia en el tema. Cuando la situación se normalizó, la demanda de componentes como los SSD también volvió a la normalidad, y empresas como Samsung y Micron experimentaron un exceso de oferta, lo que provocó una reducción en los precios para incrementar la demanda.
El problema es que se generaron pérdidas al vender a precios tan bajos y se decidió recortar la producción. La demanda ha seguido creciendo, pero los precios también han aumentado. El CEO de Phison está preocupado por la situación que se está generando, ya que si los precios de los SSD siguen subiendo, la demanda podría caer.
Phison propone aumentar la producción, satisfacer la demanda actual y evitar mayores aumentos de precios.
Para prevenir esta situación, el CEO de Phison sugiere abandonar los recortes de producción y centrarse en satisfacer la demanda actual antes de que sea muy tarde. Si la oferta se reduce debido a una baja producción y la demanda sigue creciendo, los precios continuarán aumentando. Por otro lado, si los precios aumentan demasiado, los consumidores no estarán dispuestos a comprar SSD tan caros, optando por opciones de menor capacidad o incluso por discos duros si hay mucha diferencia de precio.
El CEO de Phison cree que lo mejor para la industria es mantener un equilibrio entre la oferta y la demanda. Es poco probable que volvamos a ver precios tan bajos como antes, ya que la caída de estos se debió a un exceso de inventario. La industria teme que se repita una situación similar, puesto que, aunque para los usuarios es beneficioso adquirir discos a bajo costo, para las empresas esto representa pérdidas millonarias.